La Santísima Virgen María, como Madre y Reina de los Últimos Tiempos, es también Reina de los Profetas y Medianera de las Gracias que le confiere la Santísima Trinidad. A través de las Profecías nos van indicando porqué debemos orar para salvación de las almas, de la Iglesia que resurgirá y de la Creación Divina.